El falafel, como símbolo de la victoria de la vida sobre el horror de la Shoá

El 18 de enero de 1945, cuando David “Dugo” Leitner era apenas un niño fue obligado a realizar la llamada “marcha de la muerte”- traslados masivos ante la avanzada de las fuerzas aliadas- desde el campo de exterminio nazi de Auschwitz. Para no desanimarse, recordó a su madre Golda, quien le había contado sobre los «panecillos redondos que se comen en la Tierra de Israel”, o como los conocemos todos “falafel”

Después de sobrevivir al Holocausto y emigrar a Israel, visitó el mercado de Mahane Yehuda, en Jerusalem, y comió una porción de falafel, que le recordó los “panecillos” de los que hablaba su madre. Desde entonces, cada 18 de enero, “Dugo” come una porción de falafel, como símbolo de celebración de la vida ante la promesa de que nunca más pasará hambre.

Este año, las embajadas de Israel en Varsovia y Londres decidieron sumarse a la tradición de “Dugo” y utilizarla para difundir la memoria de la Shoá, con motivo del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto que se celebrará el próximo miércoles.

Como parte de la actividad para recordar a las víctimas del Holocausto en Polonia y para difundir la historia de David Leitner, la embajada en Varsovia distribuyó porciones de falafel en el centro de la ciudad. En Londres, la sede diplomática donó alrededor de 100 porciones de falafel a un refugio para personas sin hogar llamado Homeless Action Barnet.

La «Operación Dugo» ha sido cubierta por los principales medios de comunicación en Polonia y Londres y ha estado acompañada por una campaña de difusión en las redes sociales. Además, figuras de renombre en Polonia participarán en la actividad y pedirán al público polaco que también lo haga.

Vía YnetEspañol